Más de 160 personas siguen la Jornada sobre la situación de la mujer en el contexto de los desplazamientos forzados

Más de 160 personas siguen la Jornada sobre la situación de la mujer en el contexto de los desplazamientos forzados

19/03/2021

• La actividad ha sido organizada por la Unidad Contra la Violencia de Género, en colaboración con ACNUR

• Segura destaca la gran aceptación a nivel nacional entre entidades, organizaciones e instituciones que trabajan en este ámbito

• “Las circunstancias no hacen posible una actividad presencial pero se continua con el trabajo de sensibilización y formación”, señala

• Explica que muchas se ven obligadas a huir por el hecho de ser mujeres y en la huida “el peligro de sufrir violencias se multiplica”


Más de 160 personas se han inscrito y seguido la Jornada ‘La situación de la mujer en el contexto de los desplazamientos forzados’, organizada desde la Unidad de Coordinación Contra la Violencia Sobre la Mujer de la Delegación del Gobierno en Melilla, en colaboración con  el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR)

La actividad, que tuvo lugar el pasado martes, 17 de marzo, “ha tenido una gran aceptación a nivel nacional entre las entidades, organizaciones e instituciones que trabajan en este ámbito: Unidades de Coordinación de Violencia de Género, CETI, colegios de abogadas y abogados, oficinas de Asilo, ONGs…”, tal y como ha destacado la responsable de la Unidad, Laura Segura.

Entre los objetivos de esta formación estaban el de sensibilizar sobre la situación de las mujeres solicitantes de asilo y refugiadas en España, sus necesidades -incluidas en el ámbito de la salud-, sus fortalezas y los retos a los que se enfrentan y re forzar los mecanismos de trabajo y coordinación entre los diferentes.

Pero también “pretendemos promover la reflexión y el debate sobre la protección de las mujeres refugiadas y solicitantes de asilo en Melilla, para mejorar su identificación, derivación, asistencia y protección”, ha indicado Segura.

Así, la apertura de la Jornada corrió de la mano de la propia Laura Segura y de la Representante en España de ACNUR, Sophie Muller. Además, se proyectó el vídeo sobre prevención de violencia de género entre mujeres refugiadas, solicitantes de asilo y migrantes “Violencia de género: ¿qué es?”.

Temas y expertos

Entre las intervenciones y los contenidos abordados en esta formación destacan el de ‘Conceptos básicos sobre violencia de género’, de la Jefa del Departamento de ONGD en la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) en el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Miriam Benterrak.

También la charla sobre protección internacional y asistencia jurídica, tema que fue analizado por el Jefe de Área de África en la Oficina de Asilo y Refugio, Juan José Álvarez Galán; la Coordinadora de los Turnos de Oficio de Extranjería y de Asistencia a Víctimas de Violencia de Género del Ilustre Colegio de Abogados de Melilla, Francisca Gómez Díaz; y Eva Menéndez, que es un referente en temas de género de la Delegación de ACNUR en España.

Otra de las intervenciones versó sobre la perspectiva de género en la acogida de mujeres refugiadas y solicitantes de protección internacional. Una cuestión que fue analizada por la Coordinadora del Programa ODOS de la Fundación Emet Arco Iris, Cristina Manzanedo. Programa que este último 25 de noviembre recibió un reconocimiento especial por parte de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género como proyecto piloto innovador dentro del apartado de proyectos sociales.

Por último, la Coordinadora del Área de Intervención Social de la Federación de Planificación Familiar Estatal, Raquel Hurtado López, abordó la violencia de género en contextos de desplazamiento y la salud de las mujeres.

Violencia física o sexual

“Las circunstancias no han hecho posible una actividad presencial pero gracias a estos formatos online se está continuando con el trabajo de sensibilización y formación tan necesario en la lucha contra la violencia de género y está permitiendo seguir con el trabajo en red, ofreciendo la posibilidad de llegar a muchas más personas”, ha explicado Segura.

Algo muy importante, ha señalado, en base a los datos de ONU Mujeres, que apuntan que el 35% de las mujeres en el mundo, es decir q de cada 3, ha sufrido violencia física o sexual por parte de una pareja íntima, o violencia sexual por terceros en algún momento de su vida.

Además, según esta fuente, las mujeres y niñas representan conjuntamente un 72% de las víctimas de la trata de seres humanos a nivel mundial, y las niñas suponen más de tres cuartas partes de las víctimas infantiles de la trata. La trata de mujeres y niñas se realiza, en la mayoría de los casos, con fines de explotación sexual.

En 2019, una de cada cinco mujeres de 20 a 24 años se había casado antes de cumplir los 18 y, al menos 200 millones de mujeres y niñas de 15 a 49 años han sido sometidas a la mutilación genital femenina en los 31 países en los que se concentra esta forma de violencia contra las mujeres.

También es muy significativa la cifra de 15 millones de niñas adolescentes de 15 a 19 años, que han experimentado relaciones sexuales forzadas en todo el mundo. O el hecho de que víctimas de trata con fines de explotación sexual, violencia sexual, prostitución forzada,  esterilizaciones y embarazos forzosos, víctimas de matrimonio forzados o precoz, víctimas de crímenes de honor, ataques y discriminación debido a su orientación sexual, o por negarse a acatar normas, valores o costumbres sociales represivas, son las violencias a las que la mitad de las personas refugiadas están expuestas o son ya el motivo de los desplazamientos forzados

80 millones desplazadas

“La crisis del Covid-19 es una situación que está dejando consecuencias muy graves para la población mundial y que como siempre, tiene un doble impacto en las personas más vulnerables”, ha argumentado Segura. En este sentido ha apuntado que uno de los colectivos más afectado por esta crisis, es el de las mujeres migrantes, “que están más expuestas que nunca a sufrir todo tipo de violencias y a ser captadas como víctimas de la trata de personas”.

“La situación de vulnerabilidad social y económica que lleva a miles de mujeres a migrar, junto a la crisis económica derivada de la pandemia por coronavirus, somete a estas mujeres a una mayor inseguridad y precariedad”, ha explicado.

Así, según datos aportados por ACNUR, el desplazamiento forzado superaba los 80 millones de personas a mediados de 2020 en un momento en que la Covid-19 pone a prueba la protección a personas refugiadas en todo el mundo, millones de personas que se habían visto obligadas a abandonar sus hogares como consecuencia de persecuciones, conflictos y violaciones de los derechos humanos.

“Para las personas forzadas a huir, la Covid-19 ha supuesto una crisis adicional de protección y medios de vida además de una emergencia mundial de salud pública”, ha recalcado, al tiempo que ha expuesto que el virus ha alterado todos los aspectos de la vida humana y ha empeorado gravemente los desafíos existentes para las personas desplazadas por la fuerza y apátridas.

Las mujeres representan el 48% de la población refugiada mundial, mujeres y niñas no son solo víctimas de las guerras en sí, también lo son de la violencia sexual como arma de guerra.

“Muchas se ven obligadas a huir por el simple hecho de ser mujeres. Durante la huida, el peligro de sufrir violencias se multiplica y en tiempos de guerra, cargan con toda la responsabilidad familiar”, ha revelado.

Ahondando en esta cuestión, la responsable de la Unidad Contra la Violencia de Género denuncia que sufren formas específicas de violencia por el simple hecho de ser mujer, se enfrentan al doble de peligros y tienen la mitad de oportunidades. “Los riesgos a los que se exponen antes, durante y después de la huida son enormes”, ha lamentado.

A su vez, las violencias que sufren las mujeres están directamente relacionadas con la posición de las mujeres en la sociedad y  con la feminización de la pobreza, ha dejado claro. “Son una terrible  manifestación de la desigualdad en la que se encuentran las mujeres en el mundo”, asevera.

Es por ello que desde la Unidad se considera esencial el trabajo en sensibilización y perspectiva de género para las personas que trabajan con personas desplazadas y refugiadas, y se valora el trabajo de aquellas instituciones, organizaciones y asociaciones que están implicadas en esta tan importante labor y que luchan cada día por la consecución de una sociedad más justa, igualitaria e inclusiva, y que combaten con sus acciones los discursos del odio.