La Delegación del Gobierno y MAGRAMA explican al sector cárnico los cambios en la certificación veterinaria para la exportación a terceros países

La Delegación del Gobierno y MAGRAMA explican al sector cárnico los cambios en la certificación veterinaria para la exportación a terceros países
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24/02/2016

La Delegación del Gobierno en Cataluña y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) han celebrado hoy una jornada informativa para explicar a las empresas exportadoras del sector cárnico los cambios derivados de la aplicación del Real Decreto 993/2014, que regula la certificación veterinaria para la exportación a terceros países.

Dada la importancia del sector exportador en Cataluña -y en especial del sector cárnico-, la Delegación del Gobierno, en colaboración con el MAGRAMA, ha convocado a esta jornada a los principales representantes del sector. El secretario general de la Delegación del Gobierno en Cataluña, Simón Pérez, el director del Área de Agricultura de la Delegación, José Luis Guarga, y el subdirector general de Acuerdos Sanitarios y Control en Frontera del MAGRAMA, Miguel Ángel Martín, han abierto el acto, al que han asistido miembros de las dos principales asociaciones de empresas cárnicas -ANAFRIC (Asociación Nacional de Almacenes Frigoríficos de Carne y Salas de Despiece) y FECIC (Federación Catalana de Industrias de la Carne)- así como directivos del Colegio Oficial de Agentes de Aduana.

El Real Decreto 993/2014 establece el procedimiento y los requisitos de la certificación veterinaria oficial para la exportación de animales y productos a terceros países. Se trata, por tanto, de un RD que ofrece garantías a la hora de cumplir con la normativa existente en países donde las normas difieren de las intracomunitarias. La emisión de un certificado veterinario tiene una doble finalidad: reducir la carga administrativa y mejorar las garantías sanitarias de la certificación. Cabe destacar, en este sentido, que los objetivos de la certificación veterinaria no sólo van dirigidos a dar garantías a los mercados exteriores, sino también a mejorar la coordinación entre las Administraciones implicadas, de forma que se establezca un sistema ágil y práctico a la altura de la potencia exportadora que es España.